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Chapucillas

Posted in Política with tags , , , on diciembre 1, 2009 by africatalan

 

Hoy sale una columna de opinión en El País (edición digital) de Andrés Oppenheimer en la cual se establece que “los líderes populistas que llegan al poder prometiendo erradicar la corrupción a menudo terminan liderando Gobiernos aún más podridos que los anteriores.” Según el autor, la causa de que naciones como Venezuela, Ecuador, Bolivia, o Nicaragua aparezcan entre las más corruptas del mundo se debe a que “se trata de naciones cuyos gobernantes han intentado adueñarse de todas las instituciones del Estado, y que ahora están tratando de acallar a los medios.”

Para el autor, Uribe lidera una Colombia con simples «tendencias contradictorias»

 

Así establece Oppenheimer una relación causal entre populismo y corrupción bastante chapucera. Para empezar, el organismo que prepara el ranking de corrupción mundial en el que se basa el artículo -Transparencia Internacional, un grupo no gubernamental con sede en Alemania- queda en entredicho por las palabras del propio articulista, para quien el alto puesto que ocupa EEUU entre los países con poca corrupción no se ve respaldado por escándalos como el de Bernard Madoff.

 

Continuando con esta vinculación entre populismo y corrupción, el autor mete a gobiernos como el de Venezuela junto con el de Bolivia, equiparando el gobierno de un ex-militar apoyado por bases políticas con poca tradición, con el de un antiguo sindicalista apoyado por movimientos sociales y partidos políticos de larga experiencia surgidos de una ciudad –Cochabamba- con una tradición secular de movilizaciones políticas.

 

Pero es que además, entre los países donde hay poca corrupción, y en los que en teoría no hay populismo, mete a Uruguay, ¡el primer país latinoamericano en donde surgió un líder populista! Y en el segundo bloque, el de países “de en medio” coloca a Brasil, Colombia, y Perú. En las tres ha habido grandes líderes populistas (Getúlio Vargas, Jorge Eliecer Gaitán, y Víctor Raúl Haya de la Torre), si bien sólo en Brasil llegaron al poder. Pero el liderazgo populista en términos amplios continúa calando en los tres países: Alán García o Álvaro Uribe mantienen formas y discursos netamente populistas, definiéndolos como estilo del discurso y la movilización, insisto.

 

Y el colmo es que pongan a Colombia entre los países intermedios entre los grupos de poca y mucha corrupción. Con los paramilitares campando a sus anchas en el medio rural, cooptando instituciones, concentrando la riqueza, y todo con la connivencia del gobierno, quien los extraditó hace pocos días para evitar que se les juzgue por crímenes contra la humanidad.

 

En fin, la intencionalidad política de la columna es clara: sacar argumentos de donde no los hay para criticar a los gobiernos de izquierdas de Venezuela, Bolivia, o Ecuador. Y para ello monta un argumento terriblemente chapucero.